Si las manualidades son tu pasión no podrás resistirte a pintar un abanico de forma fácil y rápida.

Cómo pintar un abanico

Después de las vacaciones y la tan temida vuelta al trabajo nada mejor que quitarte el estrés pintando. Por ello hoy aprenderás a personalizar tu abanico desde cero.

Antes de meternos de lleno en su elaboración volvamos atrás al tiempo para conocer el origen de los abanicos. Su nacimiento es algo difuso ya que podemos llegar a pensar que ya se utilizaba en la Antigüedad. Esto lo corroboramos al acceder a la cultura de civilizaciones remotas como Egipto, Grecia y Roma donde, gracias a diversas obras de arte, podemos visualizar el uso de este objeto entre sus ciudadanos.

De este modo, el color de un abanico puede llegar a ser lo primordial de este instrumento. Así pues, volvamos a la fabricación.

Cómo pintarlo paso a paso

1. Lo primero a la hora de pintar un abanico está en la compra del mismo. Te recomendamos un abanico plegable de madera dado que será más fácil trabajar con él, aunque también te lo puedes comprar de material sintético. Las bandas preferiblemente tienen que ser de tela, aunque también hay en papel.

2. Calcaremos el dibujo que queremos poner en nuestro abanico, por ejemplo, unas flores, para ello emplearemos un lápiz.

3. A la hora de pintar recomendamos hacerlo con un pincel, y puedes pintar con témperas, rotuladores, pinturas acrílicas.

4. Pintaremos los bordes utilizando poca cantidad de pintura para que no se estropee el dibujo. Cuando terminemos este proceso, podremos rellenar el resto del dibujo.

5. Pondremos detalles personalizados al abanico como piedras, ramas, purpurina, estrellas, etc.

6. Dejaremos el abanico abierto unas horas para que se seque y, ¡listo! Ya lo tendremos terminado.

Con todo esto, tendremos nuestro abanico pintado y terminado para darle el mejor uso en nuestro día a día.